Los amores incomprendidos son los que más nos hacen perder la cabeza, a veces no nos enganchamos a quien mejor nos ama, sino a quien no nos sabe amar, es la lucha por conseguir el amor de quien anhelamos, y en ésa lucha, perdemos nuestros principios muchas veces, nuestra identidad se suplanta llevando de apellido el nombre de esa otra persona.
Existen expertos en la confusión, hay besos ambiguos y falsas esperanzas. Tal vez sea una de las peores enfermedades que conozco.
También pude titular este post como; ¿porqué lo llaman amor cuando quieren decir sexo? pues son ésas historias realmente las que nos destrozan, es cuando esperas después de un beso un "te quiero" y este jamás llega, cuando malinterpretamos quizá el trasfondo de una relación que jamás se permite pasar del umbral de incondicional a estable.
No sé si a día de hoy volvería a caer en una historia de amor incomprendida, que se prolonga a lo largo del tiempo y que es el paso del mismo el que se usa como cohartada para justificar que lo que dura en el tiempo es real.
Lo cierto es que una mentira puede ser eterna. Antes, hace años, y tal vez no tantos, era una niña aún que creía que quien ama, ama sin condiciones, ¡y qué equivocada estaba!.
Encontré por casualidad un escrito que usé para desahogarme o para comprender una historia de esas que hacen pupa y hieren quizá, una sensiblidad mayor; el alma.
Hace ya mucho de cuando lo escribí, tanto que han pasado más de 1460 días, pero aún así, releo una vez lo escrito y el sentimiento de desasosiego continúa tan presente, que me da escalofríos.
Espero que sólo sea la sombra de algo que no volverá a entrar en mi vida. A día de hoy, creo que he llegado a comprender donde estuvieron mis errores para caer en historias así.
Hoy mi corazón bombea sanamente al lado de alguien que da respuesta a mi teoría del "buen amor".
Me escribo a mi misma porque tengo la necesidad de hablar, de sacar qué
es lo que realmente me preocupa o inquieta, sí que lo sé... pero parece
que queriendo callar esa voz que me sale de dentro me voy a sentir mejor.
Tal vez sí, o tal vez sea mejor ahogar todo lo que hace que yo ahora esté
bajo estas condiciones para olvidar, éso si olvidar se plantease fácil.
¿Porqué y para qué nacen los sentimientos? ¿para qué surgen si nos
hacen daño a veces? y otras nos cuesta acallarlos, disminuirlos, hacerlos
desaparecer... siempre ando en un debate sobre si mis emociones son buenas o
tengo que esconderlas y olvidarlas.
Me siento nerviosa, inquieta, diría que te echo de menos, que me falta
una pequeña cosa cuando no te veo, pero no tengo la certeza total de esta
verdad. ¿ Y sí me estoy dejando llevar irresponsablemente con todo esto? ¿ y
si es verdad eso que dices que lo voy a pasar mal? no quiero. Eso es lo que
sé, y estoy inquieta porque la naturaleza de los buenos sentimientos no es
hacerlos desaparecer... ése no es su fin. No me explicó qué buscabas... y si
tan bien sabías qué querías porqué no escogiste otro camino... y porqué
precisamente yo? éso que quería se puede obtener de cualquiera.
Mil preguntas y otras mil tantas angustias,
procuro llevarlo bien, pero cada día no se suma al
olvido, sino que multiplica el tibio recuerdo, un recuerdo que se evapora y
que transformo exagerándolo.
Procuro mantenerme serena, mantenerme tranquila, olvidada de esta
historia, pero toca en mis paredes, en mi estómago, mi pecho, mi corazón
todas estas preguntas que me cuesta tanto darles la espalda.
¿Qué sientes? ¿qué
querías? ¿qué buscaba yo y porqué me dejé llevar?
A veces creo sentirte, o igual invento el sentirte para no culparme
tanto. Y siento que me recuerdas, que ambos nos preguntamos muchas
cosas... y que parece ser más larga la distancia, o parece que hay muchos
días que no hablamos. Y es verdad, para mi; una eternidad. ¿Qué tienes que me
faltas cuando no te veo, cuando estás lejos? ¿qué tienes que me debilitas
cuando te vas?
Quisiera encontrar una señal esta semana sin ti... estando tan lejos.
es lo que realmente me preocupa o inquieta, sí que lo sé... pero parece
que queriendo callar esa voz que me sale de dentro me voy a sentir mejor.
Tal vez sí, o tal vez sea mejor ahogar todo lo que hace que yo ahora esté
bajo estas condiciones para olvidar, éso si olvidar se plantease fácil.
¿Porqué y para qué nacen los sentimientos? ¿para qué surgen si nos
hacen daño a veces? y otras nos cuesta acallarlos, disminuirlos, hacerlos
desaparecer... siempre ando en un debate sobre si mis emociones son buenas o
tengo que esconderlas y olvidarlas.
Me siento nerviosa, inquieta, diría que te echo de menos, que me falta
una pequeña cosa cuando no te veo, pero no tengo la certeza total de esta
verdad. ¿ Y sí me estoy dejando llevar irresponsablemente con todo esto? ¿ y
si es verdad eso que dices que lo voy a pasar mal? no quiero. Eso es lo que
sé, y estoy inquieta porque la naturaleza de los buenos sentimientos no es
hacerlos desaparecer... ése no es su fin. No me explicó qué buscabas... y si
tan bien sabías qué querías porqué no escogiste otro camino... y porqué
precisamente yo? éso que quería se puede obtener de cualquiera.
Mil preguntas y otras mil tantas angustias,
procuro llevarlo bien, pero cada día no se suma al
olvido, sino que multiplica el tibio recuerdo, un recuerdo que se evapora y
que transformo exagerándolo.
Procuro mantenerme serena, mantenerme tranquila, olvidada de esta
historia, pero toca en mis paredes, en mi estómago, mi pecho, mi corazón
todas estas preguntas que me cuesta tanto darles la espalda.
¿Qué sientes? ¿qué
querías? ¿qué buscaba yo y porqué me dejé llevar?
A veces creo sentirte, o igual invento el sentirte para no culparme
tanto. Y siento que me recuerdas, que ambos nos preguntamos muchas
cosas... y que parece ser más larga la distancia, o parece que hay muchos
días que no hablamos. Y es verdad, para mi; una eternidad. ¿Qué tienes que me
faltas cuando no te veo, cuando estás lejos? ¿qué tienes que me debilitas
cuando te vas?
Quisiera encontrar una señal esta semana sin ti... estando tan lejos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario