miércoles, 26 de octubre de 2011

Poniéndome el disfraz de superwoman

No pretendo ponerme el disfraz de superwoman e ir por la vida pegando gritos de guerra, pero ahora mismo, el espíritu de superwoman ¡¡lo llevo por dentro!!

Últimamente se me están juntando muchas cosas que hacer, pero el esfuerzo valdrá la pena sin duda. Ya he empezado con la temporada intensiva de la zarzuela, donde soy miembro del coro y vamos al 100%, hoy llegaremos a casa más allá de las 12 de la noche pero creo que la adrenalina será incluso mayor y nos mantendrá despiertos. Este viernes debuto en el teatro, ¡suena muy bien! aunque mi papel es bastante pequeño es una pieza más para que toda la parafernalia funcione.

La vida de artista, es dura y siento que está muy mal pagada ,bueno, más que sentirlo es una realidad, obvio está que no lo hacemos por dinero, ya que lo que vale nuestro contrato por un año de trabajo es bastante "pobre". Creo que a todos nos queda esa sensación, pero lo único que compensa es la satisfacción personal, y no solo hablo de "satisfacción" sino de realización, que es lo que en parte me pasa, el decir -"soy capaz de..." - y no tener miedo a intentarlo.

Somos muchos y todos quieren pisarse los talones para estar frente y chupar "cámara" (como digo yo) parece mentira que estando al nivel que estamos (que no es ni sombra de estar cerca de las estrellas de Holliwood) la competitividad, el sacar el pecho y estirar el cuello está a la orden del día.

Los empujoncillos o las miradas de reojo y rabia cuando el director de escena te selecciona para interpretar algún papelillo son agujas que se te clavan en las cervicales.

Son unos cuantos los que se pisotean para estar en primera fila, otros nos quedamos atrás y nos miramos cómplices diciendo... -¡¡¡¡Aaay que veeer!!! - Luchar contra ellos no tiene sentido.
También es de sabios esperar a que llegue nuestro momento sin empujar al de al lado.

Yo considero que todos tenemos un "algo" y que en la vida de artista debemos explotar individualmente nuestro "algo" para poder llegar a tener ese duende del que los expertos hablan, puesto que si no "emocionas" tampoco existes. Aclaro que ser experto para mi, es simplemente alguien que sepa sentir y apreciar el arte.


No creo que el ser soprano sea para mi mi mayor aspiración, llegué aquí de "casualidad" pero sin embargo el teatro me está enseñando muchas otras cosas que sin duda me enriquecen y aportan un granito más a ése duendecillo que tengo, aunque pienso en mi fondo que solo estoy de "paso" y que encontraré mi realización artística en otro lugar... ¡¡aunque sea en solitario!!.

No me siento superwoman por hacer lo que hago, por ensayar cada noche y llegar tardísimo a casa, no... me siento superwoman porque creo en mí, y no me dejo apabullar por las agujas en la cervical... me lo creo porque siento que estoy realizando un esfuerzo, y un esfuerzo en muchos aspectos de mi vida.

Mientras compagino los retos artísticos con los profesionales. Sigo en lucha constante por encontrar ése sitio laboral que merezco, sin cansancio en la búsqueda.... ¡¡Mirando pa´l frente!!

Para triunfar, hay que esforzarse, sí señor.... No hablo de ser una super woman que lo hace todo bien, no, yo no quiero ser perfecta ni hacer muchas cosas a la vez de manera mecánica, pero quiero esforzarme por hacer las cosas que hago lo mejor que pueda, por alcanzar las metas a las que aspiro sin pausas, por mejorar los aspectos de mi misma que quisiera cambiar, y es que para triunfar y TRIUNFAR en mayúsculas hay que esforzarse, no vale que te lo den todo de regalo.

Nuestros dones hay que potenciarlos y a veces para ello requiere de nuestro esfuerzo, nuestra capacidad de superación y sobre todo, la confianza que pongamos en nosotros mismos. Y la confianza debe ser gigante pues los chupa cámaras siempre se encargarán de echarte a un lado.

No vine aqui para competir con los demás, pues considero que ya todos tenemos un hueco asignado delante o detrás; lo verdaderamente importante, es encontrar dónde está y llegar hasta él, puesto que siempre o casi siempre está más alto de lo que pensamos.

martes, 18 de octubre de 2011

Un angelito peludo



Llevo varias horas emocionada...
Este fin de semana dejé a Martina en casa de mi madre, hoy después del trabajo iba a pasar a recogerla, pero ha pasado algo horrible... la pobrecita anoche saltó por donde no debía y esta mañana le encontraron. Mi conejita peludita y linda ha pasado a "Mejor vida" una vida donde sin duda va a estar todo el santo día pegando saltitos de alegría.

Anoche, sobre la una de la mañana me vino esta escena a la cabeza y pensé que era solo la preocupación de una "madre" histérica. Pero esta mañana me llamaron al trabajo y me confirmaron que no era un pétalo de una pesadilla sino que pasó en realidad.

¡Pobrecita! la verdad que le voy a echar muchísimo de menos.

Ha pasado 4 meses de sus 5 meses de vida a mi lado. Royendo a veces lo que no debía pero siendo un angelito que olía a perfume. Parecía un peluche y yo andaba como loca con ella.
Ahora mismo,me siento un poco tonta por estar escondida en mi despacho empapando los clinex con moquera y lágrimas pero creo que es de humanos el reconocer la tristeza y asumir la pérdida, aunque sea de nuestras mascotas... porque la pérdida es grande, al menos en mi caso. Vivíamos las dos solas.

Nunca me atreví a tener ningún animalito en casa y Martina llegó de rebote. Me mordió las cortinas y el sofá, pero ya me había dado igual. Prefería verla cada vez que llegaba del trabajo y dejarme mimar con sus lametones y ver como correteaba feliz por la casa.

Le echaré de menos durante mucho tiempo, lo sé. Y espero pensar que su alma revolotea por algún campo con mucha hierba que poder comer. :-)

Mi niñita... no pensé que me abandonase tan pronto, y menos de esta forma. En el fondo me siento un poco culpable de haberle dejado sola.

Como ella, no hay dos... la verdad que era una raza angora de conejo enano, pero ella tenía incluso las orejas tan peluditas que parecía un koala, era más que bonita.

Martina, perdóname si te dejé solita por unos días... ven a verme cuando quieras. Me quedaré con tu recuerdo...

:( en fin, aqui me quedo llorándote un poquito... adiós mi niñita!

jueves, 13 de octubre de 2011

Limpiar y limpiar...


Hace días hablé que aunque todo en mi vida parecía perfecto o al menos "progresaba adecuadamente" P.A. (como en el cole) lo cierto es que detrás de todo ese orden al sacudir un poco los cojines, la alfombra etc... el polvo que salía de todo eso nubló el ambiente.

Ésas cosas pasan por escarbar en el subconciente!! Pero bueno, creo que también en mi conciente-presente habían cosas que "se dejaron para después" o no se prestaron mucha atención que en el fondo molestaban, no lo suficiente, pero terminaban por fastidiar bastante.

Imagino que quien "quiere ordenar" también se da cuenta que hay cosas que están donde no deberían, o que debajo del sofá hay mucha pelusilla...

Éso pasa con las limpiezas a fondo que le hacemos a la casa una vez al año, pues... a nuestra casa que llevamos como sombrero también hay que darle un repasito a fondo.

Así estoy, ahora después del varullo de estos meses siento que finalmente ¡¡me toca barrer!! ahora pongo sobre la mesa lo que verdaderamente sirve o no sirve y tomo decisiones importantes sobre qué cosas tirar a la basura... Me he propuesto:

Limpiar mi vida,
vaciar para volver a llenar,
Enriquecerme de las cosas y personas que me rodean,
Superar lo antiguo, comprender para olvidar y superar,
Perdonar, agradecer y saber pedir perdón,
arreglar lo roto o lo que duele...

y seguro que hay más cosas pendientes... Pero creo que lo necesario ya lo estoy llevando a cabo.

Lo que tengo claro que no quiero "amigos de adorno" o personas con las cuales no termino de sentirme bien del todo. No quiero emplear mi tiempo en tareas que realmente no me gustan desempeñar, no quiero vivir quejándome sino adoptando soluciones.

Quiero evitar las personas conflictivas que le ven un "Pero" a todo y no saben disfrutar de las pequeñeces. Quiero rodearme de personas que me aporten, que me llenen, que en vez de restarme me sumen, de gente ALEGRE, que rie por si misma y no se te pegan como garrapatas chupándote la energía postiva....

Quiero hacer de una vez por todas esas cosas que siempre quise aprender hacer... O ir a los lugares que siempre quise y siempre dije... "algún día iré".

Creo que es el momento de tomar decisiones y atreverse a cambiar el abanico.... buscar otras opciones, eliminar lo viejo que ya no funciona pero sigue ahí por "inercia" no, no y no...

Hoy quiero ser yo, sin polvo bajo la alfombra. Aunque declare la "guerra" (pues nunca llueve a gusto de todos) no quiero mantener en mi vida ciertas cosas. Debo aprender que existió un pasado y que las cosas cambian y terminan... que hay relaciones que es mejor cambiar en tu vida, aunque duela.

Pues eso, después del terremoto emocional de mi vida, ahora toca barreeeeeer! y aunque muchas veces usé el dicho de "todo el mundo barre para su casa", esta vez quiero barrer para fuera, vaciarme de cosas innecesarias y liberarme un poco.

Quiero mirar al cielo, inspirar y llenarme de OXIGENO puro, que se llenen mis pulmones y suspirar diciendo: ¡¡Esto es vida!!

lunes, 10 de octubre de 2011

El mundo necesita gente que AME lo que hace


Esta frase me llevó a reflexionar, que sin duda, todas las personas nos dedicásemos a hacer lo que amamos, el mundo funcionaría mejor en todas sus vertientes.

Hacer todas las cosas con verdadera pasión y buscar la pasión en las cosas que hacemos, esa es la clave.
Una vez leí un libro que decía que en todo lo que hiciéramos debíamos preocuparnos en hacerlo BIEN, no podemos hacer nada sin ganas, sin voluntad, sin cariño, pues si hacemos nuestras tareas con plena dedicación y encima poniendo toda nuestra mejor voluntad en esa obra, ésta no sólo estaría mejor hecha sino que serviría de ejemplo a los demás para que justamente hagamos mejor "nuestro trabajo".

Así que a partir de ese momento, me sirvió como lema; "todo lo que hagas, hazlo lo mejor que puedas o lo mejor que sepas".

Cerca de mi casa hay un sitio donde se hacen bocadillos, perritos calientes, se venden golosinas etc... y me llama muchísimo la atención un empleado que trabaja alli que pone la música a toda mecha y a cada cliente le hace un chiste... baila, se rie y siempre le veo contento y lleva ya años que le veo y su ánimo no baja, sencillamente, eso es "hacer con amor", problablemente no hace lo que ama, sino hace con amor lo que hace. Ahí está la diferencia.

Así que aunque no nos guste nuestro trabajo, si al menos lo hacemos lo mejor posible y amamos lo que hacemos los engranajes de la rueda del destino coincidirían perfectamente.

Esa es la forma de estar más cerca de hacer lo que amamos... ¡¡amando lo que hacemos!!